HISTORIA DEL TEATRO EN GUATEMALA
HISTORIA / 18 Oct 2019 / Por: Celeste Hernández
La preparación de un clima propicio pro independencia patria, el propio momento de las luchas independentistas y luego el lento proceso de adaptación dentro de un nuevo clima político, fueron marcados obstáculos para el desarrollo teatral de Guatemala.
Además, la escasez de vías de comunicación, la falta de energía eléctrica, el puritanismo excesivo, los prejuicios religiosos y el alto índice de analfabetismo, contribuyeron al cierre de puertas al arte y a la cultura en general, pues las nuevas inquietudes intelectuales tendían a la política y por ende, al campo ideológico (conservador y liberal).
Antes de la inauguración del Teatro Carrera, existía un pequeño teatro llamado "Las Carnicerías", en el cual actuaron grupos de “drama de capa y espada” durante los años 1843 a 1862, según lo informa René García Mejía en su obra “Raíces del teatro guatemalteco”.
Al ser clausurado el teatro Las Carnicerías, se abrió otro llamado "Oriente", en donde actuaban aficionados de la ópera y el drama, entre quienes figuran como iniciadores: Petrona Romero, Anastasia Romero, Alejo Paniagua y Felipe Ortiz, Todos dirigidos por Benedicto Sáenz (1815-1857), primero guatemalteco que montó óperas traducidas, por él mismo, al castellano como: La italiana en Argel, La hija del regimiento, La sonámbula, Belisario, y otras, puestas en escena antes de que el público pudiera ver compañías extranjeras.
Ahora bien, el año de 1852, Juan Matheu y Manuel F. Pavón presentaron el proyecto de un teatro al presidente de la república, general Rafael Carrera. Una vez autorizado el proyecto, se decidió el lugar en el cual debería construirse, si en donde estaba Las Carnicerías o en la Plaza Vieja, como había pensado don Mariano Gálvez. En efecto, Carrera decidió que el edificio se levantara en esta Plaza Vieja que sería la plaza mayor de la ciudad. Juan Matheu y Ruiz de Santisteban fueron comisionados para llevar a cabo tal disposición.
Se dio al ingeniero Miguel Rivera Maestre la dirección del edificio, pero él inició solamente y renunció; lo sustituyó José Beckers, especializado en Alemania. Beckers modificó los planos de Maestre. Pedro Pérez Valenzuela en El Imparcial (4 de octubre 1979), dice:
“le hizo variaciones al proyecto primitivo y agregó el vestíbulo que tanto hermoseaba la fachada de la fábrica, que era clásica, de marcado helenismo, austera e imponente. En la espaciosa plaza ocupaba el centro y lo rodeaba una balaustrada de calicanto, entre la cual y el edificio había una alameda de naranjos, que la embellecía”.
El día de inauguración del Teatro Carrera se presentó la obra Torcuato Tasso, de Goldini, presentada por la compañía de Iglesias. El acto se inició con una obertura orquestal y la lectura de una oda del poeta español Manuel P. de la Ala, redactor del periódico londinense La Península Ibérica, y que se encontraba de paso en Guatemala.
Al triunfo de la revolución liberal de 1871 se cambió el nombre de este teatro y se le llamó "Teatro Nacional". Más tarde se le dio el nombre de "Teatro Colón", cuando la colonia italiana en Guatemala obsequió una estatua de mármol de descubridor de América, en 1892. Pérez Valenzuela dice que es muy posible que esta estatua este ahora en el Colegio de Infantes. Este teatro Colón, fue derribado a raíz de la revolución de 1944 con el templo de Minerva construido por Manuel Estrada Cabrera.
El Teatro Colón, fue centro de arte centroamericano durante muchos años, a él llegaron compañías importantes de ópera, opereta, zarzuela, drama y hasta hipnotizadores famosos. Ya en el siglo veinte, año 1911, 15 de septiembre, en él se rindió homenaje a Rafael Álvarez, compositor del himno nacional de Guatemala, y al poeta José Joaquín Palma, autor de la letra del mismo. Ellos fueron condecorados por el dramaturgo y poeta Manuel Valle.
En un principio se prohibió a los actores guatemaltecos hacer uso de las instalaciones del Teatro Carrera. Una vez realizada la revolución de 1871, con el gobierno del general Justo Rufino barrios y Miguel García Granados, se permitió a nuestros artistas actuar en este escenario.
Fuentes: Historia de la Literatura Guatemalteca/Francisco Albizurez-Catalina Barrios.
Historia de Guatemala.